Dentro de los lugares Patrimonio de la Humanidad en África, se pueden explorar las Cataratas Victoria que desde 1989 como están consideradas Bien de Patrimonio Mundial de la Unesco a conservar y proteger.
Situadas en la Frontera de Zambia y Zimbabwe, con un ancho de 1.7 km y 108 m de alto esta gran cascada tiene como singularidad, la manera en el que cae el agua, en una sola vertical, de una cima de entre 60 y 120 m de ancho esculpida por sus aguas a lo largo de una meseta o planicie semidesértica donde el rio Zambeze se despeña formando su famoso “humo que truena” (o Mosi oaTunya, como lo llama la población local), debido a la masa humeante de vapor de agua que se eleva desde la llanura que al caer produce un sónico como un rugido. Las Cataratas Victoria o Victoria Falls, como se les conoce internacionalmente, deben su nombre a David Livingtone, quien en 1855 las bautizo con este nombre en honor de la reina Victoria.
Además de disfrutar del maravilloso paisaje natural, es posible vivir experiencias únicas durante nuestra visita, como darse un chapuzón en la piscina del diablo, una pared de roca natural, que permite a los atrevidos viajeros darse un emocionante baño en el mismo borde del acantilado, a 103 metros de altura, muy cerca de la caída de las Cataratas Victoria o sobrevolar la catarata en helicóptero o en ultraligero para los más aventureros viajeros.
Las Cataratas Victoria son una sorprendente escala en un itinerario por África que nos da la oportunidad de descubrir unos de los lugares naturales más singulares del mundo.